Cuentos para leer de un jalón

El filósofo

Cuando abrió los ojos y lo miró tan lleno de placer, tan oportuno, amoroso, frágil y aprehensivo, se escondió, se perdió.

El periodista

Digiere concienzudamente la información que tiene. Busca una declaración importante para sacar nota. Espera, un tanto ansioso. ¿Hay algo más ahí?, se pregunta.

La lógica y el amor

Nada se dice cuando nada queda por decir. Y el filósofo no dijo nada. En la nada abunda el silencio; si hubiese algo, ni el sueño lo callaría, piensa el periodista. Hay un abismo ente el periodista y el filósofo, como lo hay entre Mocedades y Queen, pero el periodista lo niega, aprieta los ojos cerrados y llora.

1 Comentario

·

Deja un comentario

Deja un comentario