La historia interminable, Michael Ende

Las pasiones humanas son un misterio, y a los niños les pasa lo mismo que a los mayores. Los que se dejan llevar por ellas no pueden explicárselas, y los que no las han vivido no pueden comprenderlas. Hay hombres que se juegan la vida para subir a una montaña. Nadie, ni siquiera ellos, puede explicar realmente por qué. Otros se arruinan para conquistar el corazón de una persona que no quiere saber nada de ellos. Otros se destruyen a sí mismos por no saber resistir los placeres de la mesa… o de la botella. Algunos pierden cuanto tienen para ganar en un juego de azar, o lo sacrifican todo a una idea fija que jamás podrá realizarse. Unos cuantos creen que sólo serán felices en algún lugar distinto, y recorren el mundo durante toda la vida. Y unos pocos no descansan hasta que consiguen ser poderosos. En resumen: hay tantas pasiones distintas como hombres distintos hay.
“Quien no haya pasado nunca tardes enteras delante de un libro, con las orejas ardiéndole y el pelo caído por la cara, leyendo y leyendo, olvidado del mundo y sin darse cuenta de que tenía hambre o se estaba quedando helado…
“Quien nunca haya leído en secreto a la luz de una linterna, bajo la manta, porque papá o mamá o alguna otra persona solícita le ha apagado la luz con el argumento bienintencionado de que tiene que dormir, porque mañana hay que levantarse tempranito…
“Quien nunca haya llorado abierta o disimuladamente lágrimas amargas, porque una historia maravillosa acababa y había que decir adiós a personajes con los que había corrido tantas aventuras, a los que quería y admiraba, por los que había temido y rezado, y sin cuya compañía la vida le parecería vacía y sin sentido…
“Quien no conozca todo eso por propia experiencia no podrá comprender probablemente lo que Bastian hizo entonces.
“Miró fijamente el título del libro y sintió frío y calor a un tiempo. Eso era, justo, lo que había soñado tan a menudo y lo que, desde que se había entregado a su pasión, venía deseando: ¡una historia que no acabase nunca! ¡El libro de todos los libros!”

Quitarle a un violinista el violín o a un rey su corona era peor que llevarse el dinero de un banco.”

`Me gustaría saber´, se dijo, `qué pasa realmente en un libro cuando está cerrado. Naturalmente, dentro hay sólo letras impresas sobre el papel, pero sin embargo… Algo debe de pasar, porque cuando lo abro aparece de pronto una historia entera. Dentro hay personas que no conozco todavía, y todas las aventuras, hazañas y peleas posibles… y a veces se producen tormentas en el mar o se llega a países o ciudades exóticos. Todo eso está en el libro de algún modo. Para vivirlo hay que leerlo, eso está claro. Pero está dentro ya antes. Me gustaría saber de qué modo.´”

He ido ya demasiado lejos para volverme atrás. Sólo puedo seguir adelante, pase lo que pase.”

¡Lo que allí contaba era su propia historia! Y estaba en la Historia Interminable. Él, Bastian, ¡aparecía como un personaje en el libro cuyo lector se había considerado hasta ahora! ¡Y quién sabe qué otro lector lo leía ahora precisamente, creyendo ser también sólo un lector… y así de forma interminable!”

…se puede estar convencido de querer algo —quizá durante años— si se sabe que el deseo el irrealizable. Pero si de pronto se encuentra uno ante la posibilidad de que ese deseo ideal se convierta en realidad sólo se desea una cosa: no haberlo deseado.”

A Bastian le gustaba ser bien parecido. El que no hubiera nadie para admitirlo no le molstaba lo más mínimo. Al contrario: se alegraba de disfrutar solo de que aquel placer. No le importaba nada la admiración de los que hasta entonces lo habían despreciado. Ya no. Pensé en ellos casi con compasión.”

Aquello tenía un motivo, que Bastian sólo supo mucho, muchísimo tiempo después y que ahora no sospechaba. A cambio de la hermosura que se le había concedido, iba olvidando poco a poco que en otro tiempo había sido gordo y de piernas torcidas.
“Aunque hubiese notado algo, sin duda no le hubiera importado mucho ese recuerdo. Sin embargo, el olvido vino por sí solo, de forma totalmente imperceptible. Y cuando el recuerdo hubo desaparecido por completo, le pareció como si él hubiera sido siempre como entonces. Y precisamente por eso su deseo de ser bien parecido se calmó, porque alguien que ha sido siempre bien parecido no lo desea ya.”

Lo que no deseas te resulta inalcanzable.”

…a través del laberinto de las mil puertas sólo puede guiarte un deseo auténtico. Quien no lo tiene ha de vagar por el laberinto hasta que sabe lo que desea. Y a veces hace falta mucho tiempo para eso.”

Bastian le enseñó al león la inscripción del reverso de la Alhaja.
“—Qué significa —preguntó—. `HAZ LO QUE QUIERAS.´ Eso quiere decir que puedo hacer lo que me dé la gana, ¿no crees?
“El rostro de Graógraman pareció de pronto terriblemente serio y sus ojos comenzaron a arder.
“—No —dijo con voz profunda y retumbante—. Quiere decir que debes hacer tu Verdadera Voluntad. Y no hay nada más difícil.
“—¿Mi Verdadera Voluntad? —repitió Bastian impresionado—. ¿Qué es eso?
“—Es tu secreto más profundo, que no conoces.
“—¿Cómo puedo descubrirlo entonces?
“—Siguiendo el camino de los deseos, de uno a otro, hasta llegar al último. Ese camino te conducirá a tu Verdadera Voluntad.
“—No me parece muy difícil —opinó Bastian.
“—Es el más peligroso de todos los caminos —dijo el león.
“—¿Por qué? —preguntó Bastian—. Yo no tengo miedo.
“—No se trata de eso —retumbó Graógraman—. Ese camino exige la mayor autenticidad y atención, porque en ningún otro es tan fácil perderse para siempre.”

2 Comentarios

·

Deja un comentario

  1. Estaba pensando en leerme este libro, ya que cuando era un poco más pequeñaja me leí uno de Michael Ende que me impresionó muchísimo; toda la imaginación que plasmaban sus palabras, sus páginas llenas de originalidad… me encantó.

    Gracias por poner estos pequeños fragmentos, ahora ya tengo decidido que lo empezaré ahora mismo :)

  2. Yo amo este libro. Cuando era pequeño, me emocionó mucho. Ahora, no sé en qué rincón de mi casa estará, pero me gustaría volver a leerlo. :D gracias por recordármelo

Deja un comentario