En un post anterior, os contaba que durante el Curso de iniciación del Taller de Escritura Creativa de Israel, todas las semanas teníamos deberes que entregar en la siguiente clase. Israel nos encomendaba la tarea de escribir un cuento clásico (el esquema actancial no podía faltar) con diferentes variaciones cada semana, que añadían dificultad al ejercicio. Pues bien, para escribir cada cuento, utilicé un pequeño truco que me sirvió de mucha ayuda para aclarar las ideas y poder plasmar con más exactitud el esquema actancial, que como bien decía Israel es el corazón de las historias. Este truco no hará que tu historia sea infalible, hay muchos más factores de los que te imaginas que pueden arruinar una buena idea; la práctica es lo único que hará que nuestras historias florezcan. Pero al menos, este truco te ayudará a mantener el hilo de la historia sin desviarte demasiado.

Y si estás pensando: “Qué manía con el esquema actancial, yo prefiero sentarme y escribir lo que salga”, yo te diré: “Eso está muy bien y puede que lo leamos y nos guste, pero eso no significa que sea una historia susceptible de convertirse en literatura”. Tú quieres agarrar al lector y no soltarlo hasta que termine de leer tu historia, ¿verdad? Dejarlo pensando en lo que ha pasado ante sus ojos, y removerle algún tipo de emoción o sentimiento por dentro ¿verdad? Eso es, precisamente, lo que queremos todos. Pero antes de correr, hay que aprender a dar los primeros pasos y caminar. Antes de dibujar hay que aprender a bocetar, a encajar con cuatro líneas y media para que se intuya el objeto que hemos dibujado. Picasso dijo: “Antes de desdibujar, hay que saber dibujar”. Así que mejor aprendamos y practiquemos las técnicas básicas para contar historias, después podremos inventar y experimentar todo lo que queramos.

Vuelvo con mi truco para escribir un cuento clásico con esquema actancial. El truco simplemente es, responder las preguntas que te plantea el esquema actancial. Te lo dejo aquí abajo, cópialo si quieres o lo imprimes para tenerlo siempre presente antes de ponerte a escribir.

PREGUNTAS POR RESPONDER PARA ESCRIBIR MI CUENTO CLÁSICO

1. ¿Quién es mi protagonista?
2. ¿Qué desea conseguir más que nada en el mundo?
3. ¿Qué problemas tendrá para conseguirlo?
4. ¿Qué motiva a mi protagonista a seguir tras su objetivo a pesar de las dificultades?
5. ¿Por qué es urgente conseguir su objetivo?
6. ¿Qué cosas hará mi protagonista para intentar conseguir lo que quiere?

Si eres capaz de responder estas preguntas, significa que ya estás listo para escribir una historia que sea interesante, porque el interés de una historia recae en saber si el protagonista consigue o no su deseo. Recuerdo perfectamente el ejemplo que nos puso Israel en clase, si el protagonista quiere un helado y simplemente va a la heladería y consigue su helado, esa historia no tendrá interés alguno. Pero, ¿y si la heladería está cerrada y hace un calor sofocante?, ¿y si tiene una bajada de azúcar y se pierde por el barrio buscando otra heladería; y en diez minutos debe entrar a trabajar y sólo necesita tomar ese helado para seguir con su día sin que estalle de estrés. Esa historia sí tendría cierto interés. Queremos saber si el protagonista consigue el helado, ¿a qué sí? El final de la historia dependerá de ti, tanto si decides que tu protagonista alcance su objetivo, como si no, eso no influirá en el esquema actancial y su eficacia; dependerá de cómo decidas desarrollar la historia.

Pero vuelvo a insistir, incluso con este truco a veces cometes errores y esos son muy difíciles de ver por uno mismo, para eso no hay nada como asistir a clases, ya que no sólo recibes la valoración del profesor, sino la de los compañeros. Otro día hablaré de lo fácil que es ver los defectos en los textos de los demás y lo difícil que es verlos en los textos propios.

¿Qué? ¿Te sientes un poco más motivado a escribir una historia? Déjame un comentario si quieres preguntar algo o compartir alguna experiencia.