Como probablemente ya sabes llegué a España en 2009 porque me concedieron la beca de creación literaria de la Fundación Antonio Gala para jóvenes creadores.
Lo que no sabes es que, años antes de saber que vendría a España y que me quedaría a vivir aquí, yo había soñado con estudiar un máster en Barcelona. Llegué a pensar, porque ha pasado mucho desde que soñé con estudiar ese máster, que no lo conseguiría. Pero sí. ¡Que me mudo a Barcelona, mari!

Normalmente a mis alumnos de iniciación les cuesta soltarse en el arte de la invención. Se bloquean con facilidad cuando se trata de suceder, uno detrás de otro, hechos que compongan una historia. Es un problema común que también tiene una solución común. Yo siempre he pensado que si no puedes inventar sucesos consecutivos porque sientes que se te acaban las ideas, entonces no te esfuerces por imaginarlos, sólo recuérdalos y escríbelos. Por eso hoy te propongo hacer una práctica de escritura que te invita a convertir tus recuerdos en una historia.